La original

Ah, mira qué tenemos aquí, un rapero con ínfulas de grandeza, ¿eh?

Parece que alguien se ha tomado demasiado en serio eso de ser una leyenda del flow.

Pero hey, no te preocupes, que aunque cierren la tienda cuando entras tú, no es porque seas Madonna en los 90,

es más bien para evitar que gastes tu dinero en esa ropa estrafalaria que llevas puesta.

Y sí, seguro que cuando se apaga la TV te sientes todo un rebelde,

pero en realidad solo estás cambiando de canal para ver más reality shows mediocres.

¿Profesionalidad dices?

Claro, tan profesional como un mono haciendo malabares en un semáforo.

Y sobre esa versión original que tanto alardeas, ¿qué versión?

La que todos conocen, la del tipo que se cree el centro del universo mientras el resto del mundo se pregunta quién demonios es.

Pero bueno, sigue posando para Vogue, tal vez algún día te compren la revista para forrar el fondo de jaulas de pájaros.

Ah, y no te preocupes por ser desconocido,

porque con ese ego inflado, dudo que alguien quiera conocerte en primer lugar.

¡Ah, ah, ah!